El sexenio del presidente Enrique Peña Nieto se está acabando y en el recuento de los daños nos encontramos al sector inmobiliario cuyos indicadores de vivienda reportaron un desempeño mixto a lo largo del periodo.
De acuerdo con los datos consultados por el portal inmobiliario Propiedades.com, la tasa de inflación de vivienda subió 52%, según información del Índice Nacional de Precios del Consumidor del INEGI, que en enero de 2012 situaba a este indicador en 1.86% , mientras que para abril de este año ya se encontraba en 2.84%.
Asimismo, la demanda de vivienda ha venido a la baja, sobre todo en el último año, según datos del Sistema Nacional de Información e Indicadores de Vivienda de la Conavi.
Y es que si bien en 2012, existían 1.74 millones de trámites para comprar casa y ya en 2017 la cifra había bajado a 1.18 millones de trámites, fue en mayo de 2018 que la cifra disminuyó hasta situarse en 344,880 trámites totales.
Asimismo, si bien las tasas de crédito hipotecario disminuyeron 14.60%, la colocación de créditos aumentó hasta un 89.99%.
Y es que de acuerdo con datos obtenidos del Banco de México, en enero de 2012 las tasas del sector hipotecario se encontraban en 12.53%, mientras que en junio de 2018 ya se colocaban en 10.70%
A su vez la colocación de créditos en el mismo periodo pasó de 479,338 a 910,718 créditos hipotecarios.
«La inclusión financiera ha jugado un rol básico para incentivar la formalización de las actividades productivas de edificación y una mejor adquisición de activos residenciales», indicó Leonardo González, analista de Real Estate de Propiedades.com.
El experto también apuntó que la productividad del sector vivienda se ha caracterizado por un flujo creciente de inversión, cuyo presencia actualmente significa el 6% del Producto Interno Bruto y está correlacionada con casi 40 ramas productivas.
«La confianza del consumidor en los bienes raíces ha mejorado, hoy la vivienda es entendida como un activo de cobertura ante el riesgo e incertidumbre global», manifestó el experto.
Mientras que los temas que quedan pendientes son la adquisición de vivienda anclada al uso de subsidios, la transparencia en el segmento de alquiler y cómo lograr una mayor educación y transparencia entre el mercado de vivienda y los nodos laborales en las ciudades del país, concluyó González.