Apple ha cerrado un acuerdo de colaboración con Samsung, su principal rival en el mercado de la telefonía móvil. En los próximos meses, los poseedores de un televisor Samsung de última generación podrán acceder a todo el catálogo de películas y series de iTunes, además de poder enviar contenido multimedia desde el iPhone o el iPad al televisor a través del estándar AirPlay 2.
La aplicación está programada para la plataforma de Samsung Tizen y explota todas las posibilidades de los televisores como el uso del asistente virtual Bixby. Hasta ahora, Apple sólo ofrecía acceso a sus contenidos a través de la aplicación de iTunes incluida en todos sus productos o en ordenadores Windows, y la única forma de verlos en el televisor era a través de un Apple TV.
La colaboración puede sorprender por el historial de litigios entre ambas compañías por plagio y su posición de rivales directos en el mercado de la telefonía móvil, pero es una maniobra que muestra cómo ha cambiado Apple y cuál es su prioridad en el presente y en el futuro: su creciente negocio de servicios.
En Cupertino, los productos han sido definidos siempre por la inseparable unión de software y hardware, trabajados de principio a fin para ofrecer algo único en el negocio de la venta de smartphones, tablets y ordenadores. Pero las prioridades de la compañía han cambiando, ya no es una compañía que vende ordenadores y teléfonos: el crecimiento del iPhone tocó techo hace dos años, pero su negocio de servicios creció un 27% el último trimestre.
Pronto los ingresos por servicios serán un negocio mayor que la suma de ingresos generada por Mac y por iPad. Los servicios ya no son un simple bonus que fomenta la venta de dispositivos. Apple quiere aumentar su base de usuarios, y Samsung es un candidato perfecto por ser la marca líder en número de unidades vendidas al año en numerosos mercados clave y por su presencia y oferta en el segmento premium, donde están, potencialmente, los mejores clientes y los que en mayor probabilidad dispondrán de algún producto de la compañía estadounidense.
«Esperamos llevar la experiencia de iTunes y AirPlay 2 a incluso más clientes en todo el mundo a través de los Smart TV de Samsung, por lo que los usuarios de iPhone, iPad y Mac dispondrán de otra forma de disfrutar de su contenido favorito en la pantalla más grande de su hogar». dijo Eddy Cue, vicepresidente senior de Servicios y software de Internet de Apple, en un comunicado de prensa.
Tim Cook, consejero delegado de la compañía, dijo que espera que el negocio de los servicios doble sus ingresos para 2020 en comparación con lo generado en 2016. Por eso no sorprende que Apple introdujera su servicio de streaming musical en los altavoces Echo de Amazon pese a tener su propio altavoz inteligente ni que ahora ofrezca sus contenidos a través de televisores Samsung pese a disponer del Apple TV.
Para Apple, es más importante aumentar la base de usuarios que puede acceder a sus servicios que la venta de Apple TV por ofrecer funciones únicas. Esto no quiere decir que las ventas de Apple TV sean un fracaso (nada lo evidencia), sino que las prioridades de la compañía han cambiado y el panorama también: ya no es una guerra de dos grandes plataformas entre iOS y Android, sino un escenario de convivencia entre diferentes servicios y productos que, aunque sean de compañías diferentes, pueden beneficiar a todas las partes.