Un agujero en la capa de ozono ubicado en el Ártico hallado en marzo del 2020 se cerró por completo, de acuerdo con el Servicio de Monitoreo de Atmósfera Copernicus.
A través de Twitter, refiere que el vórtice se dividió, permitiendo la irrupción de aire rico en ozono en el Ártico, un ciclón persistente a gran escala en la zona ubicado en la media y alta troposfera y la estratosfera.
Detalló que el agujero de aproximadamente un millón de kilómetros cuadrados, ocasionado por las inusuales temperaturas gélidas que se presentaron en la estratosfera, se cerró no sólo por la disminución de la contaminación durante la pandemia del COVID-19 y por una ola de calor que se generó que ayudó a cerrarlo.
Fuente: Milenio/foto: Twitter/doh